lunes, 27 de enero de 2020

Los Caballos de Doñana que emigran a América



Los mesteños eran empleados para labores agrícolas en el tiempo de la trilla.


Un grupo de caballos en las marismas de Doñana.
Un grupo de caballos en las marismas de Doñana. H.I. (Doñana)

Por Lourdes Uquillas (EFE)

Huelva, España. Enero, 2020.Actualmente existen unos 2.500 caballos mesteño en las marismas de Doñana, especie que se exportó a las Américas, y es protagonista del documental de Antonio Márquez en el que hace un recorrido histórico, con sus descendientes -los mustang- que viven en valles de Oregon, en Estados Unidos.

Márquez, director de "Mesteño el caballo de las marismas que conquistó América", se interesó en el tema de los mesteños tras rodar un documental sobre la especie para una Discovery Match, "no sabía su historia, y poca gente la conoce aquí y en Estados Unidos, donde saben que viene de España, pero no el lugar exacto", explica.

El film narra la historia de los mesteño, caballos que vivían en libertad en las marismas de Doñana aunque, antiguamente, el hombre los utilizaba para labores agrícolas -sobre todo en el tiempo de la trilla-, o bien salían para su venta.

Los caballos "se criaban solos", sus dueños entraban para cortarles las crines -algo que se sigue haciendo ahora-, explica.

Cuando llegó la industrialización, tanto en España como en Estados Unidos, el caballo perdió su importancia para las labores del campo y en Norteamérica se empezaron a matar ejemplares, llevándolos casi a la extinción porque competían en las tierras con las vacas.

En Estados Unidos su carne se utilizaba para comida de gatos y perros, pero curiosamente un movimiento escolar iniciado por unos niños en los años setenta ha permitido que estos ejemplares tengan actualmente su santuario y sea una especie protegida.

Márquez viajó a Oregón (noroeste de Estados Unidos) para filmar los ejemplares de mustang que viven totalmente salvajes en inmensas llanuras, donde los encontró tras un recorrido de aproximadamente diez horas a caballo.

Actualmente la protección de los mustang está permitiendo que muchos ejemplares presten otro tipo de servicios "como herramienta en hipoterapia" para la rehabilitación neuromuscular, sicológica o social de personas, para deportes, entre otros fines, asegura.

Sin embargo, en España los ganaderos los siguen vendiendo como carne, con compradores sobre todo de Asturias, "un factor sobre el que damos un toque de atención en el documental".

No obstante, hay una tendencia a recuperar la especie, que actualmente tienen dos razas, explica Márquez, porque antiguamente muchos ganaderos mezclaron al mesteño con otros caballos españoles, ingleses..., para lograr ejemplares de más altura y belleza, "porque el caballo de las marismas es bastante rústico".

Otro grupo grande "se escapó" de las manos de los ganaderos locales a la Reserva Biológica de Doñana, donde viven actualmente solo unos 200 ejemplares, son los que "se conservan más genuinos", y se les conoce como los caballos de retuertas.

Los ganaderos de Almonte han creado otra raza, la de los marismeños, a la que ahora se pretende purificar, quitando todas las mezclas que en su día se hicieron, para lo que se les está mezclando con sementales de las retuertas.

En este caso, en el futuro habrá una especie con dos razas, sostiene Márquez, quien no entra en la polémica y por ello en el documental prefiere hablar del caballo de las marismas en general.

Esos caballos son los que se utilizan para la tradicional y más conocida fiesta de la Saca de las Yeguas en Almonte, pero no la única, porque también se celebra en Hinojos y otros pueblos de alrededor, dice.

El documental, coproducido por Canal Sur y Azul Videoproductora S.L., no se ha estrenado en España, pero ha sido galardonado en el EQUUS Intenational Film Festival de Estados Unidos, y ha quedado finalista en otros en Alemania y en Portland (EE.UU.).

Márquez, quien conoce bien Latinoamérica gracias a su trabajo con la televisión pública finlandesa, no descarta en un futuro realizar un segundo documental con las tradiciones que acompañaron al caballo y que aún se conservan en América con los gauchos, los pamperos, los llaneros o los cowboys.


viernes, 17 de enero de 2020

ANPBA pide al Ayuntamiento de San Bartolomé que los Caballos no salten llamas


Ávila, Castilla y León, España. Enero 2020- La Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de /os Animales (ANPBA) ha pedido al Ayuntamiento de San Bartolomé de Pinares (Ávila) que los caballos que participen la noche del jueves al viernes en las tradicionales "Luminarias" no sean obligados a pasar por encima de las hogueras.

En el escrito remitido al alcalde de esta localidad de poco más de medio millar de habitantes, Teótimo Grande, este colectivo solicita al regidor que los jinetes participantes en esta tradición se registren con anterioridad firmando su compromiso de que sus equinos no pasen por "las enormes llamas" y sí por el humo.

Esta costumbre, que coincide con la festividad de San Antón, se remonta varios siglos atrás en el tiempo y consiste en que los equinos que participan se purifican con el espeso humo que parte de las grandes hogueras distribuidas por las calles del pueblo.

Como en años anteriores, la ANPBA pide a Grande que "adopte las medidas efectivas" para que conforme con "la verdadera tradición, expresamente reconocida por el Ayuntamiento", los caballos "atraviesan la espesa humareda y no el fuego".

En este sentido, esta asociación hace referencia al posicionamiento que en 2004 realizó el Procurador del Común en esta misma línea.

La ANPBA pide al Ayuntamiento que establezca un registro de participantes en el que firme cada uno de ellos "comprometiéndose a no hacer atravesar a sus caballos por el fuego de las hogueras".

Y ello, teniendo en cuenta que "año tras año, hay jinetes que hacen pasar a sus caballos por las llamas", con lo que en su opinión "vulneran la normativa legal y la verdadera tradición y ancestral usanza". (EFE)


Tomado de: https://www.lavanguardia.com/vida/20200114/472906442516/anpba-pide-al-ayuntamiento-de-san-bartolome-que-los-caballos-no-salten-llamas.html