Caballo
Criollo Venezolano
Al
Rescate de "EL PATRIOTA OLVIDADO"
(El
Caballo Criollo Venezolano)
Por Hector Jurado Capecchi y Daniel Uranga D.
Por Hector Jurado Capecchi y Daniel Uranga D.
Vuelvan caras - Óleo de Arturo Michelena.
Breve Reseña del Caballo que llegó a Hispanoamérica:
La fenotípica de los pocos caballos criollos puros que aún existen en Venezuela demuestran que, contrariamente a lo que muchas personas expresan, esta caballada no desciende directamente del caballo Andaluz, sino que apunta a características raciales fenotípicas de un caballo diferente, por otra parte algunos registros históricos así lo constatan.
Para abordar las características raciales del caballo criollo es importante reseñar brevemente la historia del caballo en la Península Ibérica. Según el médico veterinario Gavín, A., de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León – España, comenta que esta especie aparece en esa región a principios de la edad de hierro, además, concluye en su revisión que de esta zona descienden casi todos los caballos que llegaron a América en la época de la Conquista. Pero, también se conoce que en el milenio anterior a la venida de Jesucristo, Plinio El Viejo confirmaba la existencia de tres morfotipos de caballos en la Península, los cuales son:
-->
Comparación entre los dos caballos Ibéricos primitivos: el pony Ibérico
(hoy conocido como Garrano) y el caballo Ibérico que evolucionó hasta el
caballo Lusitano de nuestros días (adaptado de Farinha y Correia, 2005)
1) El Ibérico, fue introducido por el
sur en la Península Ibérica por los Bereberes, se extendieron por esos lares
recibiendo la denominación de iberos. Este morfotipo poseía una morfología
semejante a la del caballo africano berberisco, se caracterizaba por presentar
un cuerpo regular, bella cabeza y ancas feas, de medidas eumétricas y de tipo
mongólico, de perfil convexo y grupa redondeada.
2) El Fieldón, era un ejemplar eumétrico, de unas siete cuartas de alzada de tipo tarpanico, con una cabeza grande de perfil recto, cuello corto y recto, pecho estrecho y una grupa tendiendo a la horizontalidad. Una de las características más resaltantes de este morfotipo era el paso en ambladura o andadura. Se dice que eran caballos grandes y de valor.
2) El Fieldón, era un ejemplar eumétrico, de unas siete cuartas de alzada de tipo tarpanico, con una cabeza grande de perfil recto, cuello corto y recto, pecho estrecho y una grupa tendiendo a la horizontalidad. Una de las características más resaltantes de este morfotipo era el paso en ambladura o andadura. Se dice que eran caballos grandes y de valor.
3) El Asturcon, es un caballo de menor tamaño, usualmente de zonas montañosas, pero confinado a la zona de Asturias. Este morfotipo no tuvo mayor influencia en la formación de la caballada ibérica por las limitaciones topográficas.
Con la conquista de los árabes a la región, ellos seleccionaron y mejoraron al caballo que allí encontraron, quizás hicieron algunas cruzas con caballos indígenas de la Península como por ejemplo el Soraya, y obtuvieron el caballo del Al-Andaluz o Andalucí. Posteriormente, cuando los cristianos reconquistarían sus tierras, crearon una yeguada en Valdeburón, cerca de los Picos de Europa, donde se criaban caballos Fieldones, dando origen a la raza Castellano-Leonesa. Esta se caracterizaba por no ser muy grandes, pues no solían rebasar las siete cuartas de alzada, su cabeza era grande, recta y descarnada, su cuello corto recto y delgado, su cruz alta, su dorso semirrecto, ancho, aplomos regulares, articulaciones enjutas y con pelo basto.
Con esta raza de caballos los cristianos hicieron toda la reconquista de la Península, se comenta que en aquellos tiempos, en los que se peleaba con armaduras y arneses de hierro y donde el caballo sufría la fatiga de la guerra cargado con 13 a 14 arrobas de peso (la arroba equivale a 25 kg), prueban con suficiencia la abundante bondad y guapeza de los caballos Castellanos-Leoneses en la edad media. Durante esa época se produce el enfrentamiento de dos religiones, dos culturas, dos tácticas de guerra, dos caballerías y por supuesto, de dos tipos de caballos.
Como anécdota curiosa, se registró que los Cristianos como táctica de guerra trataban de arrollar al enemigo mediante el choque frontal, con una formación en bloque, con caballeros cubiertos de armaduras, montados a la brida con unos caballos muy fuertes cubiertos también de armaduras y embrazando el lanzón, este era el Caballo Castellano Leones. Por su parte, los Musulmanes trataban de evitar el choque frontal rodeando al enemigo con nubes de flechas hasta agotarlo y acabarlo, usando caballos mas ligeros, los Andalusís, los cuales no llevaban armaduras y los montaban a la jineta.
Representación de Saladino venciendo
a Guido de Luriñám, rey de Jerusalén, le arrebata la Santa Cruz, según el
códice del Corpus Christi (Hacia1.240. Corpus Christi College. Cambrige).
Años más tarde, Alfonso VIII en la Batalla de la Navas de Tolosa, abre el paso de Despeñaperros hacia al Valle de Guadalquivir. Gracias a él, Fernando III penetra con sus tropas, y finalmente después de 28 años de guerra conquista todo el Al-Andaluz, excepto el reino de Granada. Una vez dominados los Mudejares se les prohibía la posesión de caballos que les permitieran levantarse en armas, por lo cual ellos se vieron obligados a cruzar sus yeguas con caballos Castellano-Leoneses, dejando las potrancas en España para seguir la producción de mulas y los potros los vendían en Portugal. Del cruce de las yeguas Andalusís con los caballos Castellano-Leones, se dio origen a unos productos de los que la Lafont-Pauloti dijo que “…parecían haber sido creados por la naturaleza para el modelo de la fuerza reunida con agilidad”. Mas tarde, estos caballos comenzaron a llamarse Andaluces y el caballo Castellano-Leones se reservó en este tiempo para las tropas que se enviaban a la conquista de América.
Con los párrafos anteriores se pudiera deducir que la base del caballo criollo hispanoamericano tiene un origen más cercano al caballo Castellano-Leones que al Andaluz. Probablemente, con el tiempo llegasen caballos Andaluces, sobre todo a los Virreinatos de América, pero también han debido llegar algunos ejemplares para ciertos nobles de las Capitanías Generales como la de Venezuela, dando así quizás algunas pinceladas de sangre andaluza a algunos rebaños.
Caballo Criollo Venezolano
Con el tiempo estos caballos que escaparon y se transformaron en cimarrones, sufrieron los rigores de una selección natural extremadamente dura, ya que además de tener poca oferta forrajera y de muy mala calidad producto de la acidez de las tierras, a períodos secos y otros de extrema humedad, también tuvieron que enfrentarse a altas cargas parasitarias propias del trópico, entiéndase endoparásitos y ectoparásitos. Estas condiciones solo permitían la supervivencia de los más aptos, eliminado así a aquellos ejemplares de menor resistencia. El resultado final, es sin lugar a dudas, uno de los caballos, por no decir el caballo mas resistente del Mundo, con un genoma que pudiera considerarse como único y que debe tomarse en cuenta como Patrimonio de la Humanidad.
Yegua Criolla Venezolana
La selección natural y la ausencia de
criterios zootécnicos, han hecho del criollo un animal de muy poca alzada, de
inserciones algo defectuosas y un caballo poco representativo según la
apreciación de algunos caballistas. Considerando las premisas de valorar lo
importado como mejor, se olvido al caballo venezolano o peor aún se mestizó
creyendo que así se mejoraría su raza, el resultado fue, en el mejor de los
casos, un mestizo mejorado gracias a la resistencia y nobleza del criollo, el
cual en nuestro criterio es El Gran Patriota Olvidado ya que contribuyó a
libertar a cinco naciones del yugo español. Sin este patriota, la libertad de
la América no hubiese sido posible, ya que el caballo criollo argentino, el
uruguayo, el paraguayo, el mejicano y el venezolano tienen todos un tronco
común.
Con todo lo anterior se quiere reflejar la guapeza, resistencia y nobleza del caballo venezolano, el cual ha sido y es herramienta fundamental en las labores del campo, pero preocupa que actualmente se esté extinguiendo. Sin duda alguna, los pocos criollos que han sobrevivido siguen gozando de un prestigio ancestral, pero carecen de prestancia, la intención es dirigir todos los esfuerzos posibles a recuperar a este patrimonio nacional y además, se pretende devolverle el galardón que tuvo en su época de gloria. Con ánimos de aclarar conceptos y acabar con falsas creencias, es fundamental comentar que son pocos los verdaderos criollos que quedan y no como piensa el colectivo que todo equino realengo y mal tenido es un caballo criollo. En esos casos se trata de mestizos o ejemplares degenerados que poco o nada tienen que ver con el aún existente y escaso caballo criollo. Son pocos y bien delimitados los reductos de caballos verdaderamente criollos, siendo quizás los más significativos los atajos de algunas zonas de los estados Apure, Guárico y Anzoátegui, entre otras.
Cría con estándares calificados.
Aproximación del Proyecto Piloto:
El objeto del presente proyecto es rescatar y preservar el reservorio genético del caballo criollo, para ello es imperativa la extracción y rescate de vientres seleccionados en una yeguada mínima de 20 ejemplares, así como también de un padrillo escogido. Como condición todos estos ejemplares deben estar libres de anemia infecciosa equina. Dicha selección la realizará un grupo de profesionales y técnicos, con conocimientos específicos del biotipo y se llevará a cabo en las unidades de producción donde es conocida la existencia de reductos de ejemplares pertenecientes al biotipo.
Una vez seleccionados los ejemplares, serán trasladados al centro piloto en la ciudad de Calabozo-Edo. Guárico, lugar que cuenta con una unidad de producción libre de anemia infecciosa equina, dispone de potreros aptos para los fines de selección, doma racional y reproducción de los caballos. Adicionalmente, se implementará un riguroso plan sanitario y nutricional.
La meta a mediano plazo, cinco años, es lograr mínimo cuarenta ejemplares de caballos criollos con mejor conformación músculo-esquelética y de mayor alzada, para así conservar en una mejor forma toda la actual rusticidad, guapeza y funcionalidad del equino nacional. Una vez alcanzada esta meta, el centro piloto servirá de agente difusor y multiplicador a nivel nacional del material genético resultante, con la misión de fungir como factores reproductores de calidad para las zonas donde se encuentren las yeguadas existentes que así lo requieran.
Caballo Criollo Venezolano. Nombre:
"Palo de Agua" Propietario Sr. Hector Jurado
En el país existen instituciones
académicas que también se han abocado al estudio del caballo criollo, como por
ejemplo, la Cátedra Libre del Caballo Criollo de la Universidad Centro
Occidental Lisandro Alvarado (U.C.L.A.), dirigida por el Doctor M.V. José Luis
Canelón, quienes seguramente apoyarán todo proyecto dirigido al rescate del
caballo criollo, ya que se vincula al presente proyecto por la comunión de los
objetivos planteados, el rescate del “Noble Olvidado”, denominación de dicha
Cátedra del Caballo Criollo.
Escrito por Hector Jurado Capecchi, MV, vetjurado@yahoo.com y Daniel
Uranga D.
No hay comentarios:
Publicar un comentario